La grasa también es parte del equilibrio
Durante años, los aceites y las grasas tuvieron mala prensa. Sin embargo, con el avance del conocimiento nutricional, comprendemos que no todas las grasas son iguales y que los aceites naturales pueden ser aliados poderosos para una alimentación saludable. En este blog, te contamos todo lo que necesitás saber para aprovecharlos al máximo.
¿Qué son los aceites naturales?
Los aceites naturales se extraen de frutos, semillas o frutos secos sin procesos químicos agresivos ni refinados industriales. Los más comunes son el de oliva, coco, sésamo, palta, lino y girasol prensado en frío. A diferencia de los aceites refinados, estos conservan sus antioxidantes, vitaminas y perfiles de ácidos grasos esenciales.
Beneficios reales para tu cuerpo
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Corazón más sano: los aceites ricos en ácidos grasos monoinsaturados (como el de oliva) ayudan a reducir el colesterol LDL (malo) y aumentan el HDL (bueno).
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Mejor absorción de nutrientes: muchas vitaminas (como A, D, E y K) son liposolubles, lo que significa que necesitan grasa para ser absorbidas.
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Inflamación bajo control: el omega 3 del aceite de lino o de chía tiene propiedades antiinflamatorias comprobadas.
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Piel y sistema nervioso: los aceites naturales aportan lípidos que nutren desde adentro y sostienen funciones neuronales.
¿Cuál es el mejor aceite para cocinar?
No todos los aceites se comportan igual al calor. El punto de humeo (la temperatura a la que un aceite comienza a quemarse) es clave:
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Para saltear y cocinar: aceite de coco, de palta o de oliva refinado (no extra virgen).
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Para ensaladas o terminaciones: aceite de oliva extra virgen, sésamo, lino o nuez.
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Para hornear: aceite de coco o girasol alto oleico, por su estabilidad.
¿Cómo elegir un aceite de calidad?
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Leé la etiqueta: buscá que diga “prensado en frío” o “extra virgen”, sin aditivos ni conservantes.
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Prestá atención al envase: los aceites naturales deben venir en botellas oscuras (protección de la luz) y bien selladas.
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Fecha de vencimiento y procedencia: mientras más reciente y transparente su origen, mejor.
En resumen
Los aceites naturales bien elegidos son una fuente poderosa de nutrición. Saber cómo usarlos y cuál es el más indicado para cada plato puede mejorar no solo el sabor de tus comidas, sino también tu bienestar a largo plazo.